Años y años de gobiernos UPN han llevado a Navarra al límite, años en los que ha imperado la exclusión de una parte de la sociedad, años en los que nos han impuesto un modelo económico y territorial que se muestra caduco.
En lo político, con un gobierno minoritario, débil y a la deriva. Incapaz de gobernar para la mayoría, sin alternativa a la crisis que nos golpea. Absolutamente ineficaz para atraer inversiones y generar empleo que ha conseguido que Nafarroa sea la comunidad con mayor déficit del Estado, con dos rescates encubiertos (IVA de VW y banco Santander).
Con la colaboración del PSN han dilapidado Caja de Ahorros de Navarra, haciendo desaparecer el principal instrumento financiero de Navarra y las inversiones millonarias en macro infraestructuras son de muy dudosa necesidad para el desarrollo de nuestro territorio.
En lo social están desmantelando los servicios públicos, los recortes son ideológicos y tienen el el objetivo de acabar con el Estado del Bienestar. Un gobierno en minoría que recorta libertades, cercenándolas con prohibiciones, identificaciones ideológicas innecesarias y violencia policial, acotando al límite los derechos civiles y políticos.
Las medidas impuestas y que tanto afectan a la ciudadanía han sido ejecutadas por el Gobierno de Barcina y decididas por el PP en Madrid. No han consultado a los navarros y navarras y la mala gestión del Gobierno de UPN esta llevando a Navarra y a sus ciudadanos/as a situaciones límite. Situaciones de las que nuestros pueblos no son ajenos y a los que las medidas impuestas afectan de manera especial por no decir mas perniciosa.
Alkate eta hautetsiak Foruen monumentuaren aurrean 17/10/2012Ahora tenemos encima de la mesa la propuesta de reordenación del mapa local, propuesta que esperamos y deseamos sea trasladada a los ayuntamientos y concejos para su estudio y aportación.
Esperamos que se posibilite el debate entre los vecinos y vecinas de nuestros pueblos antes de tomar ninguna medida.
La aplicación de mecanismos que activen la participación de la ciudadanía es a lo que aspiramos, ahora que el Estado tiene que responder al fracaso del modelo económico y territorial.
La ciudadanía navarra se sitúa ante la segunda oportunidad en 30 años de poder decidir su futuro.
Hace treinta años en la negociación con Madrid, la exclusión de los representantes institucionales abertzales, intentó silenciar a parte de la ciudadanía y puso en evidencia las formas empleadas. La posterior negativa a someter a refrendo lo pactado, el Amejoramiento, despejó las dudas sobre el déficit democrático que arrastraba la apuesta del Estado y de los partidos de ámbito estatal.
Tres décadas mas tarde, creemos ha llegado la hora de superar esos déficit, de poder plantear, sin impedimentos, otro modelo tanto económico como territorial.
Un modelo mas acorde con las necesidades e intereses de la ciudadanía y que en su día fue excluido del debate.
Se abre ante nosotros y nosotras la posibilidad de cerrar las heridas del pasado, de comenzar a construir un nuevo modelo, de desechar la exclusión como fórmula de lograr réditos políticos. Un modelo que plantee la participación de todos los proyectos políticos en igualdad de condiciones sin mas cortapisas que la voluntad mayoritaria de la sociedad.
Se abre la posibilidad de plantear que la ciudadanía navarra decida libremente la relación que quiere mantener con el resto de los territorios de Euskal-Herria.
Se abre la oportunidad para empezar a decidir aquí, sobre como recaudar, donde y en que gastar sin que esas decisiones se tomen a 500 km de Navarra. Se abre la posibilidad de defender los servicios públicos y de calidad que nos merecemos.
Se abre la posibilidad de respetar y proteger nuestra lengua milenaria sin sentirnos extranjeros en nuestra tierra.
Se abre la posibilidad de defender el sector primario, y construir nuestro tejido productivo, desde parámetros de solidaridad y sostenibilidad, para crear empleo de calidad.
Se abre la posibilidad de que la ciudadanía deje de ser un elemento decorativo para participar activamente en todo lo relacionado con su presente y futuro, , que los navarros y navarras participen en las políticas que atañen a su vida cotidiana.
Se abre la posibilidad de poder decir lo que pensamos sin sufrir por ello persecución, ni conculcación de derechos civiles, políticos o sindicales.
Para todo ello es necesario seguir trabajando y conformar nuevas mayorías, es necesario que la ciudadanía navarra hable. Un gobierno en minoría que no respeta a la mayoría social, una presidenta que no acata lo que el Parlamento navarro le ordena que defienda, sino que se pliega a la voz y a los intereses de su amo en Madrid, no puede seguir al frente de la comunidad.
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